miércoles, 12 de diciembre de 2012

El videodromo(III)


Sorcerer(carga maldita) de William Friedkin



La primera película de Friedkin tras el exorcista fue el remake de la obra maestra francesa ''el salario del miedo'' de Clouzot. Gran parte de la trama ocurre en un pueblo perdido de Costa Rica donde 4 personas con vicisitudes muy diferentes deben transportar un material peligroso entre puentes ruinosos, fango y tormentas tropicales.

Aunque el resultado final dista mucho de la obra que adapta, la pericia técnica del director justifica el visionado, con un estilo muy parecido al utilizado en French connection, tono muy realista y de gran fuerza visual(como la escena del puente), aunque arrastra el problema de que la productora metió mano en el montaje cortando muchas escenas lo cual lastra bastante la narración y su profundidad, aún así es una película intensa, donde se plasma el miedo, el cansancio y sufrimiento de los personajes, con un buen reparto(sale incluso Paco Rabal en un personaje muy alejado de los que solía hacer habitualmente) y planos de gran calidad.

Creo que se merece un mayor aprecio del que tuvo, algo habitual en la carrera de Friedkin(ya le ocurrió algo parecido con su excelente A la caza que recibió excelentes críticas en Cannes cuando volvió a proyectarse en un nuevo montaje).


Le passage (Trayecto mortal) de René Manzor



Drama francés bastante sombrío que combina el cuento infantil y la fantasía apocalíptica, aparte de ser una obra en cierto modo innovadora mezclando la animación y la imagen real, no de manera brillante pero si convincente.

Alain Delon es el protagonista, co-guionista y productor del film, quizás por ello su interpretación está algo falta de fuerza ante tantas responsabilidades durante el rodaje aunque su talento y presencia le bastan para mantener a flote la situación.

El guión es bastante curioso y original, centrado principalmente entre un padre dibujante de comics que está preparando una película, su hijo pequeño y la muerte como entidad que recurre al padre para que este le otorgue la posibilidad de destruir el mundo con una película sobre la violencia porque está harta y aburrida de su trabajo.
Lo mejor para mí es la relación padre-hijo con escenas llenas de fuerza y sentimiento cuando ambos miran los rostros de cada uno(el hijo viendo un vídeo de su padre, el padre viendo un dibujo de su hijo), lo peor el montaje, deslabazado e inconexo, y algunos momentos un poco ridículos entre Delon y la muerte pero es una obra que plasma muy bien el amor entre un padre y su hijo por encima de todo.






The Pawnbroker (El prestamista) de Sidney Lumet



Una obra que trata el stress post-traumático de una manera brutal a través de los ojos de un judío que sobrevivió al Holocausto y regenta una tienda de préstamos.
Sus vivencias a través de flashbacks, su pasotísmo, frialdad e indiferencia ante las personas y el entorno que le rodea definen al personaje de Rod Steiger que ofrece una interpretación mastodóntica e inolvidable.

Lumet se acompaña de un guión carbonizado y vacío de sentimentalismos como el corazón del protagonista y una amplia versatilidad de movimientos de la cámara con primeros planos y recorridos  amplios sobre su persona para acentuar la sensación de angustia y pesadumbre.
El contrapunto lo pone una banda sonora jazzística dirigida por Quincy Jones que aparece con fuerza en el tramo final de manera desaforada y en cierto modo alegre para dejar la duda de si el protagonista vuelve a recobrar la fuerza y el deseo por vivir.

Lo peor aunque no necesariamente malo, podría definirse como ante tal centralización sobre el protagonista el resto quede algo desdibujado y simplificado y la puesta en escena parece algo mundana pero recrea bien el Harlem empobrecido y peligroso sometido por explotadores de la época de los 60.


10 Rillington place(el estrangulador de Rillington place) de Richard Fleischer



Tras el estrangulador de Boston, Fleischer volvió a abordar la historia de un asesino en serie, en este caso la historia de John Christie, que ocultaba a sus victimas en el jardín de su casa y las violaba mientras las estrangulaba(y posteriormente).

Mientras la anterior entraba en el género más policiaco, en esta vemos la manera de actuar del criminal y su personalidad más profundamente(todo muy estudiado previamente utilizando los archivos sobre el caso disponibles), un mentiroso compulsivo que manipulaba no sólo su vida sino los que le rodeaban.
Excelente su presentación con la taza de té y sus educadas maneras, que acaba siendo parte de su modus operandi, rodado todo con excelsa naturalidad y parsimonia, lo cual le otorgaba un grado de repulsión extra a lo que sucedía posteriormente.

Inmenso el reparto, obviamente encabezado por Attenborough que hace un trabajo titánico por mostrar de la mejor manera posible la mezquindad y maldad del personaje pero sin excesos físicos ni manierismos. No se queda atrás la labor de John Hurt, marioneta del asesino y cabeza de turco durante años, magnificos los gestos de incredulidad e inocencia en su rostro, totalmente superado por las circunstancias.

A destacar también el buen trabajo de Fleischer con los fuera de campo y la puesta en escena, con esa escalera y esas habitaciones tan lúgubres(tremenda la escena cuando Christie, cuerda en mano, sube por la escalera para matar a la niña pequeña).